ALBA DE TORMES
Alba de Tormes con perro
A escasos 19 kilómetros de Salamanca se halla Alba de Tormes, una villa donde nobleza y santidad han marcado la historia. Aquí murió y fue enterrada Santa Teresa de Jesús, y aquí creció el foco de poder de la gran Casa de Alba. Hoy, otro acontecimiento nos hace recalar en este lugar, y es que desde octubre de 2019 esta urbe es dog friendly, a iniciativa de la Concejalía de Turismo, que ha preparado monumentos, restaurantes y alojamientos para acoger al turista con mascota. Viajar con perro a Alba de Tormes ya es posible.
Empecemos esta crónica por su oferta cultural... La ciudad llegó a contar con un gran palacio ducal, cuyos restos pueden verse en la parte más alta de la villa. Lo que parece fue, en principio, una torre de defensa, se transformó, bajo el Gran Duque de Alba, Don Fernando Álvarez de Toledo, en una fortaleza palaciega en el siglo XVI, con seis colosales torres, engalanadas, decoradas con mármoles y con pinturas murales renacentistas. Hoy queda la imponente Torre del Homenaje, que tuvimos la suerte de visitar porque es dog friendly.
En lo más alto se sitúa un mirador desde el que se pueden ver los cimientos que marcan el perímetro de la antigua fortaleza, además del aljibe, los jardines, y una panorámica de la ciudad y su río. En el interior de la torre, intactos, se conservan unos enormes frescos renacentistas que muestran pasajes de la batalla de Mühlberg, pintados por Cristóbal Passin y Miguel Ruíz de Carvajal. Y en la parte de abajo se puede visitar un pequeño museo con curiosas piezas de distintas épocas. A pesar de haber sido una de las más importantes de la geografía española, la fortaleza no pudo resistir los envites del tiempo y, especialmente, los de las tropas de Napoleón y de Julián Sánchez, El Charro.
Nuestra ruta siguió por el Museo de la Alfarería, dentro en la iglesia de Santiago, y también dog friendly. Se encuentra en un edificio Bien de Interés Cultural, construído en el siglo XI y principios del XII. Es uno de los mejores ejemplos del románico mudéjar de la provincia, lugar de enterramiento de personajes ilustres. Dentro, el museo permite conocer el trabajo de la alfarería, que fue una industria próspera de esta villa. Nos llamó mucho la atención las piezas decoradas en el estilo de filigrana, tan típico de Alba de Tormes.
En el 1571 Santa Teresa fundó el convento de la Anunciación de Nuestra Señora del Carmen, donde murió el 4 de octubre de 1582. Sin duda su presencia ha marcado la vida de Alba de Tormes y hoy día miles de devotos pasan cada año por aquí para acercarse un poco más a la santa abulense.
Los turistas con perro pueden visitar el Museo Teresiano y de San Juan de la Cruz, instalado en un ala anexa al convento de San Juan de la Cruz y en el que puede verse una reproducción de la humilde habitación del santo, un sarcófago que albergó la mitad del cuerpo del santo, el comedor de clausura…
Y a las afueras de Alba de Tormes nos espera otra sorpresa: el Museo Arqueológico Padre Belda. Situado en el Convento de San Jerónimo, alberga la colección que el Padre Belda cultivo a lo largo de toda su vida. Se exponen 400 piezas singulares que invitan a hacer un recorrido por la Historia y por el Arte de la humanidad. Aquí hay desde herramientas de piedra y cerámicas del Paleolítico y del Mesolítico, hasta monedas romanas, un sepulcro medieval, una cabeza reducida de jíbaro, o un fragmento de tapa de un sarcófago egipcio. La mayoría de piezas proceden de Francia, la Península Ibérica y el norte de África, aunque también las hay de otras partes del mundo. Nos resultó súper interesante conocerlo, y hasta me retrate con un sable de la época de Napoleón.
HOTEL PARA IR CON MASCOTA EN ALBA DE TORMES
En octubre de 2019, cuando visitamos Alba de Tormes, solo había un hotel que aceptara perros educados en la ciudad, pero la buena noticia es que es un buen hotel y encima tiene un gran restaurante, que también es dog friendly. Se trata de Don Fadrique.
El edificio está levantado sobre un cerro cercano desde el que se divisa la villa. Tiene un enorme jardín en el que suelen celebrar eventos, bodas... Lo regentan Nico y Manuel quienes, además, son unos excelentes chefs, y han logrado convertir este alojamiento familiar en un lugar acogedor alejado del ajetreo.
Las habitaciones son amplias y luminosas, decoradas con un toque personal, y los baños están impecables. Las mascotas no pagamos suplemento pero, por supuesto, tenemos que ser educadas, portarnos bien y no ocasionar ningún desperfecto.
DÓNDE COMER CON PERRO EN ALBA DE TORMES
Aquí también hay tres restaurantes dog friendly: Doña Matea, La Santa, y el mencionado restaurante del Hotel Don Fadrique. Estuvimos en los tres. Doña Matea, en el centro urbano, es un típico restaurante de la localidad, de carta sencilla pero muy rica, y admite a los perretes en la zona del bar. Sirve un jamón y queso buenísimos, por cierto. En el centro se halla también La Santa, con una carta más sofisticada. Aquí, mi humano optó por un salteado de verduras y un plato de cachopo y todo estaba rico, rico. Por último, el restaurante del Hotel Don Fadrique ofrece una carta de productos de temporada, con elaboraciones sencillas pero muy creativas y con buenos productos ibéricos. Sus chefs, Nico y Manuel, sin duda hacen las delicias de los comensales.
Recuerda que si tienes un hotel, bar, restaurante… y quieres pasar a admitir clientes con perros educados, nos puedes escribir y sumaremos a esta lista tu negocio.
DORMIR CON PERRO EN ALBA DE TORMES
Hotel Don Fadrique. Ctra. Salamanca, km 17 (a la salida de la ciudad).
COMER CON PERRO EN ALBA DE TORMES
Aconsejamos reservar antes e indicar que se va con perro para que el local pueda reservar la ubicación más cómoda para todos:
Doña Matea. Calle Sánchez Llevot, 4.
La Santa. Calle Padre Belda, 3.
Restaurante del Hotel Don Fadrique. Ctra. Salamanca, km 17 (a la salida de la ciudad).