ALQUÉZAR
Alquézar con perro
Aragón tiene algunos de los pueblos más bonitos de España y la villa de Alquézar es uno de ellos. A escasos 50 minutos de Huesca por carretera, enclavada en el cañón del Río Vero, esta preciosa localidad medieval es la excusa perfecta para practicar descenso de barrancos con tu perro en el Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara y del Río Vero.
Aragón destila grandeza y su pasado regio pervive aún en muchos rincones de esta región. Presume de idílicos paisajes y de algunos de los pueblos más bonitos de España y, para algunos, del mundo. Entre ellos está Alquézar, al que hemos regresado a principios de marzo de 2020, aferrados a la imagen elevada de su colegiata, su coqueta arquitectura medieval y el privilegiado entorno natural en el que se enclava: el Parque Natural de la Sierra y los Cañones de Guara y del Río Vero.
Nos alojamos en la Casa Rural Carmen de Arnas, en el pequeño pueblecito de Colungo, a diez minutos de nuestro destino. Un alojamiento más que recomendable, muy original, perfectamente integrado en el entorno, con una cuidada decoración rústica y decenas de detalles que nos han permitido desconectar y descansar. Esta casa rural de piedra, de tres plantas y cuatro apartamentos independientes y totalmente equipados, no cobra por el alojamiento de los perretes, ni pone objeción alguna al tamaño, peso o número de mascotas por apartamento, lo que facilita la estancia a los viajeros con perros. Es de agradecer que haya lugares en España tan dog friendly como este alojamiento rural, que puedes ver en mi vídeo en esta misma página. Mención especial quiero hacer a Maite, la responsable de recibir a los huéspedes y de hacer que la estancia sea la mejor posible.
ACCESO CON PERROS A BARES Y RESTAURANTES EN ARAGÓN
Para los turistas con mascota que visitan Aragón, la hora de comer se convierte en un problema. La razón es que en esta comunidad autónoma había, hasta diciembre de 2022, un lío jurídico que en la práctica frenaba la aceptación de mascotas en la hostelería (la normativa autonómica prohíbe a los lugares que sirven comida que sean ellos los que decidan si las mascotas podemos o no entrar, mientras que algunas ordenanzas municipales sí lo permiten). La situación normativa cambió con la publicación de un Real Decreto permisivo en diciembre de 2022 y, de hecho, el propio Ayuntamiento de Zaragoza presentó en marzo de 2023 una guía para animar a bares, restaurantes… a aceptar mascotas de una manera ordenada. Puedes ver la guía en este enlace.
Esperamos volver pronto por Aragón y, ya que esta inseguridad jurídica se ha despejado, ser testigos de un auge de comercios amigos de las mascotas y daros aquí nuestras pistas.
Sobra decir que, si el tiempo lo permite, en Alquézar podemos comer en las terrazas de los restaurantes. Hay unas cuantas en la entrada al pueblo, cerca del aparcamiento, con vistas a su colegiata. En Colungo también hay un restaurante con una terraza amplia cubierta.
LA FORTALEZA DE ALQUÉZAR
Alquézar, está dominada por su colegiata, cuya sola silueta alegra la vista. Un agradable paseo por el pueblo, declarado Conjunto Histórico Artístico, nos traslada a la Edad Media. Desde la preciosa plaza vieja nos dirigimos a lo alto del cerro, donde se yergue el castillo de origen musulmán y la Colegiata de Santa María (siglo XVI, con algunos restos de la original del siglo XI). Excepto al interior de la iglesia, a la que sólo se permite el acceso con perros pequeños en brazos, los perretes podemos recorrer atados todo el recinto amurallado y contemplar el magnífico paisaje que se domina desde este lugar. Ojo al limitado horario de apertura, que en nuestro caso, al ser marzo, era de 11.00 A 13.30 y de 16.00 a 18.00 (de abril a octubre suele ser de 11.00 A 13.30 y de 16.30 a 19.30). Podéis consultar los horarios actualizados en la web de Alquézar.
PASEOS Y BARRANQUISMO CON PERRO
Pero Alquézar tiene muchas más experiencias que aportar al viajero, como son las preciosas rutas que se pueden recorrer a pie o en bicicleta, e incluso la práctica de barranquismo. Nosotros hicimos parte de una de las rutas que desemboca en el puente de Villacantal y para recorrerla contamos con los mejores guías que se pueden tener y que pertenecen a la asociación CanyonCan (Asociación Aragonesa de Actividades Caninas). Nos quedamos sorprendidos del paraíso natural que esconden los barrancos a los que, sin duda, tenemos que volver en verano, la época ideal para practicar barranquismo.
Tengo que confesaros que durante la excursión rumbo al río no paré de ladrar a los buitres. Los perros tenemos que ir atados en el parque natural, por cierto. Yo, desde luego, con tanta ave carroñera volando sobre mi cabeza me habría escapado seguro en su búsqueda a riesgo de caerme despeñado.
De lo que no me privé fue de un rápido chapuzón en las cristalinas aguas del río Vero, ataviado, eso sí, con mi chaleco de seguridad que me facilitaron mis amigos de Trixie, por si las moscas. Aprovechando que no había nadie por allí a quien pudiera molestar, pude corretear libre en torno al puente de piedra de Villacantal (siglo XVI), que pone la guinda al idílico entorno. Precisamente este puente es el final de las rutas de barrancos que se realizan, sobre todo, en verano, cuando el calor aprieta y las frías aguas son el bálsamo perfecto. Tenéis información sobre el descenso de barrancos con perro en la página de Facebook de la Asociación Aragonesa de Actividades Caninas CanyonCan.
Desde Alquézar se puede hacer otra ruta igualmente interesante, que no tuvimos tiempo de hacer: Las pasarelas de Alquézar. Hay que llegar a ellas por otra ruta que parte del pueblo. Las pasarelas de Alquézar constituye un recorrido de montaña de 3 kilómetros que aprovecha el desnivel del terreno (de unos 160 metros) así como las pasarelas construidas para el aprovechamiento de los recursos naturales. Desde la plaza Mayor, en dirección a la Colegiata, las primeras pasarelas aparecen en esta ruta encajonadas entre los muros de la Colegiata y Peña Castibián. Siete tramos de pasarelas de madera, metal y piedra permiten alcanzar el río Vero y contemplar, al tiempo, el Barranco de la Fuente.
Nosotros no fuimos porque nuestra guía, Anita, nos contó que la superficie de las pasarelas no son cómodas para las patitas de los perros y porque muchos sufren de vértigo al subir a estas plataformas suspendidas sobre el vacío. Os dejamos la web de las pasarelas para que juzguéis por vosotros mismos. Si tu perro no tiene vértigo, quizá con ponerle calzado adecuado es suficiente. Ten en cuenta también que las pasarelas son estrechas y el recorrido puede ser incómodo para ti y otras personas.
Una última ruta de una hora y media aproximadamente desemboca en las Balsas de Basacol, unas láminas de agua pensadas para el abastecimiento a la localidad de Alquézar y sus huertas. Desde el pueblo se accede a ellas ascendiendo por el camino natural del Somontano de Barbastro, pasando por la ermita de San Gregorio y por un punto de observación de buitres.
Hasta aquí nuestro paseo con perro por Alquézar. ¡Seguimos on tour!
DORMIR CON PERRO EN ALQUÉZAR
Hotel Santa María de Alquézar. Tel. 974 31 84 36
Casa Rural Carmen de Arnas (Colungo, a 14 min en coche). Tel. 619 95 92 92